Te habría dicho una y otra vez que no quería esto, que sé que te puedo ayudar, que sé que puedo hacerte cambiar, hacerte feliz. Pero sé que querés hacerlo solo. Y te tengo que dejar. No soy quien como para tratar de retenerte, y ni siquiera sé qué voy a hacer yo.
La vida sigue.
Pero algo... algo en tu forma de abrazarme hoy, me dijo que nos vamos a volver a ver. Que ese abrazo, lo vas a necesitar (yo ya lo necesito). Y que ese abrazo te va a reconfortar.
Porque hasta el último minuto te quise mostrar mi mejor sonrisa. Y vos me opacaste con la tuya. Siento que te hago feliz. Y sentí hasta que tan dolida como estaba...
era feliz igual.
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