Cuando pasa el tren, miro fijamente y te busco (como si fuera posible encontrar a alguien en un tren, a las 7.30, 8.00 pm). Te busco desesperadamente. Empiezo a caminar, creyendo que acortando la distancia al tren, te voy a encontrar más fácilmente. Y miro
miro
miro
miro
miromiro
no estásy pasan caras desconocidas
te miran una milésima de segundo
y a la otra, te comenzaron a olvidar,
y volvieron a sus respectivas vidas, a no reconocer tu existencia
y a vivir sin recordar tu cara.
Te busco y te busco, sabiendo que no estás. Y todo el que me ve en el tren, me vuelve a olvidar.
Bueno, si era así, talvez vos sí estás ahí.
Me mirás, me mirás y me volvés a olvidar.
{...porque cada vez que me mirabas, nunca veías mi cara; veías a otra persona. Esa persona que te olvidó, cuando su tren pasó.}
No hay comentarios:
Publicar un comentario